En cierta ocasión, mientras un consejero real deambulaba por el palacio, vio por primera vez en su vida un halcón real.
Hasta entonces, el consejero jamás había visto semejante clase de “paloma”. De modo que tomó unas tijeras y cortó con ellas las garras, las alas y el pico del halcón.
«Ahora pareces un pájaro como es debido», dijo. «Tu cuidador te ha tenido muy descuidado».
- REFLEXIÓN: ¡Ay de aquellas personas que no conocen más mundo que aquel en el que viven y no tienen nada que aprender de las personas con las que hablan! Cualquier persona puede sorprendernos con su personalidad y su manera de actuar... siempre que le demos la oportunidad de mostrárnoslo.