6 de septiembre de 2014

LEVANTARSE Y SER VISTO

Cuando Kruschev pronunció su famosa denuncia de la era stalinista, cuentan que uno de los presentes en el Comité Central dijo:
—¿Dónde estabas tú, camarada Kruschev, cuando fueron asesinadas todas esas personas inocentes?
Kruschev se detuvo, miró en torno por toda la sala y dijo:
—Agradecería que quien lo ha dicho tuviera la bondad de ponerse en pie.
La tensión se podía mascar en la sala. Pero nadie se levantó.
Entonces dijo Kruschev:
—Muy bien, ya tienes la respuesta, seas quien seas. Yo me encontraba exactamente en el mismo lugar en que tú estás ahora.
 
  • REFLEXIÓN: Decir la verdad tal como uno la ve requiere mucho valor cuando uno pertenece a una institución. Pero desafiar a la propia institución exige aún más valor. Eso es lo que se espera de nosotros: que mantengamos siempre nuestra postura cuando creamos que es justa, y no nos dejemos avasallar por el poder.